[GALERÍA] Fue hermoso lo que pasó el domingo 2 de octubre en el Monumental. Ya lo que había pasado el día anterior en el Arengazo más concurrido de la historia anticipaba que podría haber una fiesta en Macul. El hincha apoyó en masa a un equipo que por esas cosas de la vida (y de la suerte) marchaba en el penúltimo lugar de la tabla de posiciones.

Colo-Colo arrasó a la U.de Chile. En parte por el partidazo que hizo el equipo local y en parte por la mierda de partido que hizo la visita, que mostró casi nada.

Colo-Colo jugó motivado, ordenado, ganoso. La U, desorientada, cagada entera y sin ideas. La diferencia estuvo a la vista.

Apareció el Martintín que contrató Colo-Colo, resucitó el  Luz Divina de hace varios años, los argentinos de atrás estuvieron espectacular, el Mono Pavez se comió la cancha y todo lo que se le cruzó por delante, Paredes en lo suyo y Octavito jugó su mejor partido con la camiseta blanca. Incluso Ramón, resistido por muchos, estuvo a la altura de las circunstancias. Sólo le faltó el gol.

Apareció el Colo-Colo que Guede quiere. Bien atrás, bien por los lados, bien al medio y bien adelante.

Ganarle a la U siempre es una alegría gigante, pero ganarle así, da esperanza de terminar dignamente el Apertura y dan ganasde pelear la Copa Chile. Con este equipo así de motivado, seguramente se podrá.

(Fotos robadas de ANFP y Prensa Fútbol)