Por Erick Zavala, panelista del #Colocoleit
Si empezamos a mirar un poco para atrás, solo un poco, nos damos cuenta que en varios momentos de la historia reciente de Colo-Colo ha sido difícil llenar los 11 espacios del equipo titular con nombres que nos dejen contentos a todos. Muchas veces, de los 11, 5 no tenían el nivel para estar en el plantel de honor del club mas grande Chile. Veríamos, también, que muchas veces los jugadores en banca han estado solo por cumplir, porque no hay ninguna opción de que sean real alternativa de cambiar un partido si la situación es adversa. Tantas otras una lesión desmoronó el castillo completo de un solo remezón. El flagelo interminable de los planteles cortos.
Pero cuando miramos el presente, vemos que este año vivimos el lado inverso del problema, una sillita musical, por decirlo de alguna forma. Mucho nombre que perfectamente podrían estar en el 11 titular, pero muy pocos espacios. Algunas opciones que se han barajado para solucionar el tema son: jugar sin arquero, poner solo 2 defensas o pedir a la FIFA poder tener 13 jugadores. Todas se descartaron.
Pero vamos a los nombres, para que quede mas claro aun la dimensión del «problema». Este domingo la formación tuvo en la titular a Orion, Zaldivia, Barroso, Campos, Opazo, Carmona, Baeza, Vejar, Valdivia, Orellana y Paredes. Alto equipo, buen funcionamiento, mucha entrega y lo mejor, ganador. Todo bien hasta ahí, pero… ¿dónde ponemos a los que faltan? Cómo ajustamos una formación para poner nombres como: Valdés, Insaurralde, Berrios, Gaby Suazo, Cesar Pinares, Iván Morales, Octavio Rivero, Meza (cuando se recupere), Fierro o Villanueva. si sumamos a Cortés tenemos otro 11 con jugadores titulares en cualquier lado, titulares que habríamos agradecido en esos años negros de Colo-Colo, cuando teníamos planteles llenos de muertos. 11 jugadores de gran utilidad en cualquier planteamiento y que tienen que pelearla en un equipo armado y que está funcionando bien.
Es verdad, van recién 2 fechas y un amistoso, pero ya podemos hacernos algunas ideas, como que Carmona debería ser titular indiscutido, porque entrega equilibrio y libera de tareas de marca a Baeza y Valdivia. Opazo, Baeza, Valdivia no pueden salir del equipo. Pero no podemos dejar fuera a Pajarito. Entonces, ¿sacamos a Vejar y mandamos a Pajarito al costado? ¿Usamos la opción de solo un delantero aunque nunca nos haya dado resultados? Difícil.
Aunque son muchas las opciones, muchas las variantes y pocos los puestos, ojalá tener este «problema» todos los años.
Y ustedes, ¿a quién dejan abajo de la silla cuando pare la música?