[CAMPEONATO NACIONAL] Un domingo 6 de mayo, Tito volvió al Monumental. Su casa lo recibía con el cariño y gratitud por “la 23, la 30 y las que vendrán” hermosa frase por todo lo que Héctor dio y da a la institución.
El partido comenzaba con caras nuevas, Fierro titular al igual que Villanueva y el debut oficial de Cortés. Como en Manta, Valdivia muy activo en el campo quién junto a Esteban y Valdés realizaban varias jugadas que hacían al público levantarse de sus asientos. Fue en una de esas, que al minuto 11 con asistencia de Opazo, “Maguinho” abre el marcador con un muy buen gol. Luego de ello, el partido decayó en el ritmo, a pesar que el cacique dominaba el no lograba concretar las llegadas.
En esa siesta, el ever forever aprovechó un error defensivo del Cake, y puso la paridad al minuto 36’. Digámoslo con complicidad del arquero. Sin embargo, éste tendría su revancha más adelante.
Tito movió las piezas en el segundo tiempo e hizo ingresar al Niño Véjar x el Chico Villanueva de pálido partido. Con esto el cacique mejoró velocidad por la banda izquierda, donde antes teníamos 0 especialistas, con Opazo y Brayan no se pasaron más zozobras, por el contrario, se llegó mucho más dando paso al show de Esteban.
Al minuto 52’ en un contragolpe con gran asistencia de Valdivia, liquidó a Lobos sacándose la marca de un “blandito” K.Medel. Y la guinda de la torta, luego de varios intentos fue a los 71’ con un centro del (resucitado) Brayan que encontró los pies benditos del Tanque.
El partido se cerró ahí, con varios aspectos positivos a destacar, como la buena actuación de Cortés, la destacada participación de Fierro y la inclusión de jugadores que parecían desterrados. Si bien, el rival no mostró mucho y era obligación ganar, se destacan las ganas y la velocidad que mostró el equipo en sus mejores pasajes. Da para ilusionarse con la clasificación en Libertadores.