[CAMPEONATO NACIONAL] Aun con un poco de frustración por la derrota de mitad de semana por Copa Libertadores, más de 20.000 colocolinos llegaron al Monumental con la esperanza de un triunfo rehabilitador.
Lamentablemente la cosa empezó mal. La ilusión que generaba una formación con lo mejor disponible, se vio frustrada por un gran inicio de la visita y por una serie de errores del local.
El gol de Huachipato no tardó en llegar y Colo-Colo se vio en la necesidad de cambiar el switch y despertar.
Un gran gol del precioso Octavio Rivero… perdón, un precioso gol del gran Octavio Rivero, puso las cosas en igualdad y abrió una ruta de esperanza. Más tarde, el Torta generó un nuevo penal, que otra vez Paredes, como si se tratara de una maldición, desperdició.
El segundo tiempo trajo un poquito más de claridad, la suficiente para que el propio Rivero terminara en gol una gran jugada comandada por Pinares y Paredes.
Eso fue. El resto, aguantar. Y un pelotazo en el travesaño de Orión que casi nos provoca un infarto.